Los antibióticos farmacéuticos son, sin duda, uno de los mejores inventos de la humanidad. Ayudan a salvar la vida de muchas personas que de otro modo habrían muerto de varias infecciones. Hay diferentes tipos de antibióticos farmacéuticos disponibles. Usando diferentes tipos, puedes tratar infecciones bacterianas y algunos tipos de parásitos. El problema con los antibióticos, sin embargo, es que no pueden tratar las infecciones causadas por virus o hongos. Esto significa que las infecciones como los resfriados, la gripe, muchos tipos de tos y dolor de garganta son inmunes al tratamiento con antibióticos. Otro problema con los antibióticos en estos días es que a veces se recetan en exceso. Esto es peligroso porque el uso indebido y el uso excesivo de antibióticos puede conducir a la resistencia a los antibióticos.
Esto es cuando un antibiótico ha perdido la capacidad de controlar o matar bacterias. En otras palabras, las bacterias ahora son resistentes y continúan multiplicándose. A pesar de la presencia de un antibiótico, la infección tiende a empeorar. La buena noticia es que la naturaleza nos ha proporcionado muchos antibióticos naturales. Estos también ayudan a combatir muchas infecciones. Puede que no sean suficientes para tratar infecciones graves. Pero, a veces pueden ser útiles como tratamiento complementario junto con lo que su médico le ha recetado. Sigue leyendo para 15 antibióticos naturales
1. Ajo
Este pequeño bulbo picante amado por muchos amantes de la comida es, según la ciencia, un antibiótico natural, con propiedades antivirales y antifúngicas. Un estudio de 1999 encontró que el ajo contiene compuestos de azufre llamados alicianos. Estos actúan como antibióticos naturales. Un estudio realizado en 2011 confirmó los hallazgos del estudio anterior, utilizando ajo en forma de extracto. Además, a su capacidad para matar gérmenes, el ajo también contiene una amplia variedad de vitaminas, minerales y nutrientes que son beneficiosos para el cuerpo. El ajo es bajo en calorías, pero es rico en manganeso, vitamina B6 y vitamina C. También contiene cantidades significativas de hierro, vitamina B1, fósforo, potasio y cobre.
El ajo también puede ayudar a matar los parásitos intestinales. Para hacer esto, come 2 o 3 dientes de ajo crudos todos los días con el estómago vacío. Incluya también el ajo en su cocina. También puedes tomar suplementos de ajo para protegerte contra diversas enfermedades y patógenos. Es una buena idea consultar a un médico antes de empezar a tomar cualquier suplemento. El ajo es seguro de consumir, pero sus enormes dosis tienen el potencial de causar sangrado interno. Esto es particularmente importante cuando se considera suplementos o extractos de ajo. No exceda la dosis recomendada. Las personas que toman medicamentos anticoagulantes deben consultar a un médico antes de tomar ajo con fines antibióticos. Recuerda que el ajo puede amplificar los efectos de este tipo de droga.