Enfermedades cardíacas siguen siendo la principal causa de muerte en todo el mundo, responsables de casi 18 millones de fallecimientos anuales según la Organización Mundial de la Salud. El sistema cardiovascular, compuesto por el corazón y los vasos sanguíneos, es crucial para transportar oxígeno y nutrientes por todo el cuerpo.
Lamentablemente, muchas personas no son conscientes de los problemas cardíacos hasta que los síntomas se vuelven graves, lo que convierte a la detección tardía en un obstáculo importante para un tratamiento eficaz. Comprender los hábitos diarios que dañan silenciosamente la salud del corazón es esencial para prevenir esta epidemia global y promover el bienestar a largo plazo.